Ingredientes (para cuatro personas)
250 gr de fideos gordos sin gluten
1 kilo de pescado para caldo
1 sepia mediana
1 calmar mediano
Langostinos
1 tomate pera mediano
1 diente de ajo grande o 2 medianos
Aceite de oliva
Pimentón dulce
Cúrcuma
Perejil
Sal
Una pizca de canela
Procedimiento:
En una olla ponderemos el pescado para hacer el caldo, cuando comience a hervir no más de 15 minutos, apagar el fuego. Limpiar los langostinos y reservar. Limpiar la sepia y el calamar, trocearlo pequeño, reservar. Nos preparamos el tomate, el ajo y el perejil picados, reservar. En una paellera poner seis cucharadas u ocho de aceite de oliva, poner parte de la sal y darle dos vueltas a los langostinos sin que se hagan mucho (lo de la sal es para evitar que salpique demasiado) sacar y reservar. Añadir la sepia y el calamar hasta qué este algo dorado, lo siguiente el tomate junto al ajo y el perejil dejar que se haga he integre en el frito, este proceso muy lentamente, el fuego muy bajito y sin parar de remover para que no salpique, añadirle el pimentón (al gusto) y la pizca de canela, una vez el sofrito hecho añadimos los fideos y los rehogamos hasta verlos un poco dorados. Colamos y añadimos el caldo que cubra bien los fideos, que sobresalga como un dedo por arriba de ellos, ponemos la cúrcuma y removemos bien para repartir todos los ingredientes por todo. Primero a fuego fuerte, cuando vemos que el caldo comienza a menguar le bajamos el fuego y dejamos que se acaben de cocer los fideos alrededor de 10 minutos, cuando ya no queda caldo añadimos los langostinos dos minutos, apagamos el fuego lo sacamos y dejamos reposar un par de minutos. Si vemos que al fideo le falta un poco en el reposo lo tapamos con papel de aluminio y se acaban de cocer, es preferible taparlos y dejarlos algún minuto más a que se pasen, la pasta pastosa terrible, al menos para mí.
Yo siempre he hecho el caldo con pescado de roca con mucha variedad de pescados y añadiéndole un rape pequeño de los que hay en la morralla (así denominamos por aquí al pescado para caldo que lo tienen aparte) y un buen hueso de emperador, el caldo queda espesito. Desde muy pequeña que la he visto hacer el caldo y nunca han añadido verduras a dicho caldo, si es de pescado, es de pescado y hay que buscar los pescados que le den buena consistencia y lo espesen aunque muchos e quedan completamente desechos. Esta fieuá es como siempre la hacia mi abuela paterna y como la he visto hacer a mi alrededor a mis familiares. Lo de la canela es cosa de mi abuela y realmente le da un toque (le gustaba a ciertos guisos dale el toque de canela), mi marido aun recuerda el sabor que hacía aquella fideuá. Tenía también la costumbre (yo también lo hago) de el pescado más gordo del caldo desmigarlo todo y añadirlo al frito y si no tenía pescado grande cogía dos rodajas de merluza o una cortada de emperador lo freía aparte y lo integraba desmenuzado en el sofrito, queda más jugosa. Y otra cosa (aunque yo no lo hago siempre) era que el ajo y el perejil en vez de añadirlo directamente al frito lo picaba en el mortero junto a unas almendras o cacahuetes tostados y entonces lo añadía al frito, le da otro toque.
Es un plato que me encanta pero a raíz de detectarme la intolerancia al gluten dejé de hacerlo hasta que descubrí que la casa gallo (no me importa hacerle la publicidad ya que su pasta sin gluten me ha ayudado en general) hacia un fideo más gordito y decidí probar a hacerla con él. Me gusta más con su fideo original pero…lo que dicen que cuando no hay pan buenas son tortas.
Yo nací y vivo en la cuna de la fideuá, he visto a lo largo de años como la han ido destrozando al igual que la paella pero… este tema queda para un capitulo en el blog de ”MIS COSAS”.