Ingredientes
500 gr de harina sin gluten Mix B de Schar
16 gr de levadura fresca de panadero
400 ml de agua
1 cucharada de miel
20 gr de aceite de oliva
5 gr de sal
Harina de arroz
Aceite de oliva
Procedimiento:
En primer lugar templaremos el agua y desleiremos en
ella la levadura añadiéndole la cucharada de miel, integraremos todo bien, lo
taparemos con un plato y lo dejaremos reposar como un cuarto de hora
aproximadamente. Pesamos la harina y la ponemos en el bol de la amasadora, le
ponemos la sal y removemos bien. Añadimos el agua junto a la levadura y miel y
comenzamos a amasar (esta vez lo hice todo al uno), primero unos cuatro
minutos, añadir el aceite y volver amasar unos cuatro o cinco minutos
más, hasta que se quede con una consistencia homogénea, formar con
una espátula mojada en aceite una bola (esto es para poder manejar mejor la
masa ya que siempre se pega algo), si lo hago con las manos también me las unto
con un poco de aceite. Tapar con film, si se deja encima de alguna
mesa yo le pongo una mantita que tengo para ello encima, si se mete
en el horno apagado no hace falta la manta, tardara en levar según el tiempo
que haga, a mas calor más pronto, si fresco pues tarda más, tiene
que duplicar al menos su volumen, yo sin prisa. Una vez hecho el levado pasar
la masa al mármol de la cocina en el que habremos puesto algo de harina de
arroz. He vuelto a hacer los pliegues ya que me gusto el resultado antes de
formar los panes, de delante hacia atrás y de atrás hacia delante, volver a
estirar y repetir, forme los panes y los pase a una bandeja de horno con papel
para el mismo y ahí sí que ya no los metí en el horno apagado y los tape con un
paño limpio de algodón (tengo trapos de sabanas ya desechadas que utilizo para
este fin solamente) y la manta encima. Se vuelve a dejar que leven de nuevo
hasta duplicar el volumen, se hacen los cortes (en estos panes volví a hacer
los mismos cortes), meter en el horno un recipiente apto para el mismo con un
vaso de agua (esto es para generar vapor), horno que ya tendremos previamente precalentando
a 200º al menos un cuarto de hora, metemos los panes dentro en el primer nivel
del mismo unos 50 minutos, hay que vigilar siempre para
que no se nos quemen, estarán listos si al darle la vuelta al golpear el culo
nos hace toc, toc. Apagamos el horno los dejamos reposar unos segundos y los
pasamos una rejilla, esto último es para que el pan no sude y no nos
revenga.
En esta ocasión he mantenido el agua hasta el final de
la cocción y comienzo a hacer los panes algo más tostaditos, aunque sigo diciendo
que dista mucho de un pan totalmente en ok y aún la miga queda un poco mojada.